Rawa trabaja para defender y fortalecer un ecosistema social palestino emancipador y resistente que pueda resistir el dominio colonial israelí, fortalecer el tejido social y demostrar el potencial de cambio creativo liderado por la comunidad.
Con vistas a lograr una sociedad palestina liberada, autodeterminada, justa y participativa, Rawa considera que las comunidades pequeñas e intersectoriales son anclajes esenciales para que las personas puedan acceder al poder, compartir recursos y mantener el bienestar y la abundancia colectivos.
El modelo piloto de Rawa de concesión participativa de subvenciones y apoyo holístico se puso en marcha en 2018. Se han concedido más de 60 subvenciones a pequeñas iniciativas comunitarias (en su mayoría no registradas) en Cisjordania, Jerusalén, las zonas palestinas anteriores a 1948 y Gaza, en particular en los ámbitos de: